domingo, 22 de mayo de 2011

UTOPÍA

Es domingo en la mañana. Me he despertado temprano. Tras leer todas las opciones posibles en que la ley Dhom me permite ejercer mi derecho como ciudadano, me doy cuenta que es una ley injusta y totalitaria, que no permite decirle a los políticos, no me interesáis de ninguna de las maneras… Si voto en blanco estoy dándole mi voto a la mayoría. Si no voto, no pasa nada… En las elecciones donde se aprobaba la constitución europea, el 60% de los españoles con derecho a voto se quedó en casa y todo siguió igual… la constitución se aprobó y nadie hizo ninguna lectura del dato… Es más ¿Alguien se acuerda de esas elecciones y de esa constitución? ¿Qué debería pasar para que se impugnaran unas elecciones? ¿Para que se derogara este sistema electoral que beneficia a los políticos asentados y no a los ciudadanos? Un sistema que nos deja sin voz a los que no estamos de acuerdo con ninguna de las opciones políticas presentadas… Donde de ninguna de las maneras puedo decirles no me interesáis… Un sistema electoral que nos tiene presos, que hoy en día carece de sentido… que sirvió en los años 70 y principio de los 80 para asentar una democracia adolescente… que desde entonces ha dejado de crecer, de madurar, de avanzar… que beneficia un bipartidismo obsoleto y muerto…

Una ley electoral donde la abstención no tiene ninguna importancia, el voto en blanco se convierte en una merienda de negros para los más poderosos… Lo normal, creo yo, sería que el voto en blanco sirviera para mostrar tu descontento y que un número elevado sirviera para castigar a los políticos… Pero no… no hay voto de castigo… no hay opción… Sólo me queda ser un nulo… votar en nulo… poder utilizar mi derecho al voto… confeccionarme mis propias papeletas… Este año serán rosas, como las hojas de mi libreta favorita… aunque sé que sólo servirán para que vayan a la basura… pero no daré opción ni voz a nadie… Sólo confío en lo que está pasando en las calles… sólo en eso… confío que algo cambie… aunque sólo sea un pensamiento que haga que otro cambie también y otro y otro y otro… Sé que suena utópico pero no nos queda otra… hay que empezar a creer en las utopías… por eso… DEMOCRACIA REAL, YA!!!

2 comentarios:

Osete Soberano dijo...

Está bien soñar... soñar es gratis y ensancha el alma y los ideales. Pero me temo que la utopía no conducirá a ningún sitio.
Ayer estuve en una de las asambleas "soberanas" del 15-M en la Plaza de Oriente (porque en Sol les resulta imposible hablar con tranquilidad) y me di cuenta de que no vamos a conseguir nada de esa manera. No se puede luchar contra el Sistema en su totalidad... porque es una guerra perdida. Hay que concretar en ciertas cosas y constituirse utilizando los vehículos democráticos actuales. Son todos perfectibles, pero es que por fuera de los mismos no conseguiremos nada... la anarquía y el comunismo ya se demostraron históricamente ineficaces, amigo.
Un besín,
osete soberano

JD dijo...

Según le he leído a Habermas, en la Alemanía del Este, una vez caído el muro, o quizás incluso antes de caer, en esos meses previos de desorientación, surgieron grupos de debate muy serios entre los ciudadanos que se reunían para discutir la inminente transición.

Eran periodistas, profesores de universidad, gente de todos los oficios, preocupados por definir unos cuantos objetivos irrenunciables para ese colectivo que en poco tiempo iba a ser absorbido por una unidad mayor que tenía prisa. Reclamaban que la memoria de la ignominia que representaban los archivos de la Stassi no se destruyera.

Y así fue, expoleado por el debate y la presión populares orientales, como el pacto de caballeros en ciernes entre los políticos del Este y del Oeste no pudo cumplirse.

**********

Pienso que no es necesario reformar la ley electoral para pedir listas abiertas. Las listas abiertas tienen sus propios problemas. Gil hubiese gobernado en Marbella igualmente con listas abiertas. Y Ruíz Mateos. Y todo aquel que tenga dinero y un mensaje populista. El tea party dominaría al PP más de lo que lo tiene dominado. Y en el PSOE, no lo olvidemos, saldrían elegidos los que prometieran un AVE en cada pueblo, aunque luego te diesen una televisión autonómica rijosa y un plan bolonia.

Los partidos son necesarios. Cuando hacen bien su trabajo moderan el poder del líder y dan una continuidad y una profundidad al proyecto. Solo que estos de aquí y de ahora están podridos, copados por arrivistas y dinastías. Nepotismo y endogamia. Enchufismo y nulidad.

Pero es que NO es un problema político, es un problema socio-cultural. Los esquemas que vemos en los partidos son un reflejo de lo peor de nuestra sociedad. ¿O acaso no conocemos todos las dinastías que se suceden en los principales medios de comunicación? ¿Y en los ex-monopolios públicos privatizados? ¿Y en la Universidad? ¿Y entre los diplomáticos o los registradores de la propiedad?

¿Y que me decís del director de cierta ONG de relumbrón que lleva más años en el poder que cualquiera de los dictadores a los que critica? ¿Y de la falta de mujeres en puestos de dirección en las empresas?

No son más leyes ni artificios institucionales los que cambiarán el panorama. El poder de la polis está en la palabra, en la sanción moral de este tipo de conductas y en convencer a los demás de que hay que predicar con el ejemplo. Debate y transparencia: ya con eso el 15-M va sobrado.