domingo, 20 de mayo de 2007
EN MIS NOCHES HA VUELTO A CANTAR EL CUCO (capitulo 3)
LA MANCHA ROJA
El cuco está ahí, año tras año… Me pregunto, ¿será siempre el mismo? ¿Coincidió su adolescencia con la mía? ¿Está ahora negándose a crecer? ¿Está añorando como yo la juventud perdida? Los recuerdos de la adolescencia son dolorosos ya que mezclo lo que paso, con lo quise que pasará y con lo que ahora recuerdo y añoro. La casa me ofrece en cada rincón una pista de cómo fue… El pasillo, que comunica ahora todas las habitaciones de mi apartamento, en el pasado comunicaba los dormitorios con el baño… Recuerdo una noche de jueves, era invierno, en teoría me había marchado a casa de unos amigos a estudiar pero no fue así, nos subimos a las campanas, una tasca que había detrás de Santa Marta, a celebrar el cumpleaños de una amiga y nos pusimos puos de vino y cerveza… al llegar a mi casa con macuto y libros incluido, tenía que disimular. Recuerdo que todos estaban cenando y viendo Luz de Luna, por eso sé que era jueves, me senté con mi familia a cenar, intentaba disimular el peo tan salvaje que tenía siguiendo las peleas de Bruce Willis y Cybill Shepherd en su coche, pero todo me daba vueltas… dije que iba a ponerme el pijama y al subir las escaleras y al llegar al pasillo que comunicaba con el baño… no fui capaz de retener el caudal que escapo por mi boca, hice un extraño movimiento y todo el vómito regó la pared blanca… era rojo… muy rojo… había bebido mucho vino y cerveza… había bebido para olvidar… estaba enamorado como un imbécil y era incapaz de expresarle mis sentimientos a la persona a la que quería… Recuerdo que el vómito me supo más amargo de lo habitual… tenía dentro de mí demasiada hiel… sentía por aquellos días demasiada opresión dentro de mí. Me sentía frustrado… veía como muchos de mis amigos eran felices con parejas y como sus amores adolescentes eran recompensados con besos, más que besos morreos salvajes en el club bambú, que era el pub de moda en aquellos días… Vomité vino mezclado con regaliz… esa fue mi excusa cuando subió mi madre, he tomado muchas chucherías, le dije… y mi madre no dijo nada cuando me vio rodeado de toda esa mierda y descubrió su inmaculada pared blanca pintada de rojo… No recuerdo lo que pasó después, sólo sé que la mancha estuvo una larga temporada allí… mi madre intentó sacarla pero la acidez del vino y la mía propia se clavaron bien dentro de la pared. Con el vomito no desapareció el amor que sentía… supongo que siguió creciendo dentro de mí… crecía frustrado, sabía que era un aborto, una historia imposible pero yo me empeñaba, confiaba que un milagro se produjera y pudiera vivir esa historia de amor como si fuera la de una película… pero la vivía en secreto y en silencio,… intentaba imaginar miles de aventuras pero nunca se hacían realidad… y sólo las vivía dentro de mí… algunas veces esas aventuras se volvían calenturienta y me ayudaba de mi mismo para hacerlas realidad, de nuevo, sólo dentro de mí. Camino por el pasillo y la mancha de vino ya no está, han pasado 20 años… y yo sigo aquí y el cuco también… ¿estará viviendo él ahora algún amor imposible?
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
12 comentarios:
joer qué montón de preguntas me vienen a la cabeza.....
esperemos que el péndulo nos guie.. ;)
un bar por detrás de St.Marta?igen que pequeña soy...
La juventud perdida viene a ser como la sensación de que ya no viviremos el primer amor? ah, vale, tocan el segundo, el tercero, enésimo,...
Lo que es verdad es que cuando buscamos en los jóvenes nuestra propia juventud, no es cuestión de cuerpos, buscamos la intensidad de las emociones por el descubrimiento del mundo, la ingenuidad, ...
Es como cuando ves una pelicula maravillosa y vuelves a verla con alguien a quien quieres, todo el rato pendiente de sus reacciones para que te de vuelvan la intensidad de la primera visualización, por momentos consigues sentir algo parecido a través de los ojos del otro, pero no es lo mismo. A mí se me ocurre una solucióon: ver otras películas por primera vez. Te quiero canalla
pues esta semana tenemos que ver la que dijimos, no Antonio? en versión original,no?cuando guervas de Graná avisa, queamos y la vemos , la maya tb quería, ok?
¿Que pelicula?
infielllllllll
Menuda cogorza que llevabas jeje. Pero cuanto bebiste de vino si el vino como muxo a mi me ha dao mareo. No sería k te dieron vino de garrafón jeje.
Hoy me han dicho que leyera tu blog, que me iba a gustar y no se ha equivocado, me ha encantado. He leido los tres capitulos del canto del cuco, el primero me ha hecho llorar.Yo tambien tengo muchos recuerdos de esa casa y sobre todo de tu padre. Que tio mas genial, era un primor, era guapo, muy guapo, simpatico y gamberro como tu dices tambien.
Un beso Antonio.
gracias a todos por leerme... esunplacer compartir mis recuerdos, os invito a que compartáis los vuestros conmigo... muchos besos y muchos pa ti rubia
Lo unico que es para siempre es lo que se ha perdido...
De nada Antonio, de nada
Hola Antonio, acabo de leer los tres capitulos de "en mis noches ha vuelto a cantar el cuco". Me han gustado mucho, y a través de ellos te he conocido un poco más y he conocido una faceta tuya dulce y melancólica que me ha gustado mucho.
Un beso y te deseo que tengas mucha suete en esta nueva etapa de tu vida.
Antoñito orla, el capitulo 4 para cuándo mi arma???
estoy ansiosaaaaaa!
Publicar un comentario