martes, 10 de abril de 2007

VENECIA-BOLONIA

LUNES DE PASCUA,9 DE ABRIL, fiesta en italia. Estoy en la estaciòn de tren de Padova y reflexiono sobre las experiencias vividas este fin de semana. Sin duda ha sido un acierto venir a Padova y aùn un aciero mayor seleccionar, de casualidad en internet, el hotel. Un hotel nuevo en la zona industrial de Padova. Cual es mi suerte que a 100 metros del hotel està el club màs divertido, moderno y canalla en el que he estado en tiempo, se llama Flexo, y para los interesados y entendidos no se lo deben perder si vienen por estas tierras. Tiene una decoraciòn de lo mas in y minimalista. Lo he visitado las tres noches y me he llevado muy buenos recuerdos y algunos de ellos creo que jamàs olvidarè.

Como tampoco olvidarè el dìa de ayer en Vencia (domingo 8). He caminado por Venecia durante màs de 10 horas. he recorrido sus calles, me he perdido por sus pequenos, desconchados, hùmedos y estrechos callejones. he disfrutado con la grandeza de sus plazas. San Marcos... me he emocionado con sus atardeceres desde los pies de san Marcos o desde lo alto del puente Rialto... me ha gustado ver recoger sus mercados ambulantes y oler a pescado algo podrido, comer pizza en una tratoria pequena, angosta y sucia en un callejon que estaba igual que la tratoria.

Venecia no te defrauda, te da lo que te esperas. Te gusta. Te encanta. Te emociona... pero no te sorprende. Venecia es como te esperas, como has visto miles de veces en miles de pelìculas, en las fotografìas de tus 100 mejores amigos o de tus familiares. Todos tenemos que venir a Venecia y a todos nos gusta Venecia, està hecha para eso. Tiene todos esos elementos que son comunes al gusto general. Es como una gran pelìcula hecha para todos. Como ver Casablanca por primera vez hoy en dìa. Te emociona, seguro, pero ya te la sabes, ya has visto en miles de ocasiones sus imagenes... No es malo, es asì. Es el resultado de vivir en un mundo de imagenes que nos invade y que nos mandamos unos a otros... yo mismo lo hago, desde venecia enviè imagenes de la ciudad a mis amigos. Sin duda esa foto ya està en ellos y cuando vengan a Venecia ya no exitirà en factor sorpresa... pero sè que de todas formas venecia le gustarà, no puede ser de otra forma... està en su esencia.

PZA DE SAN STEFANO-BOLONIA.

En cambio Bolonia, Verona, Lucca son ciudades sin fotografìas, sin imagenes pùblicas, al contrario que Venecia. Son como esos nuevos amigos, esas personas que conoces de pronto y que llegan sin avisar a tu vida y te deslumbran y con los que conectas de una forma especial.

Son ciudades còmodas de pasear, de descubrir que no guardan extranos secretos, ya que se te ofrecen enteras, sin miedo a que descubras sus defectos, ya que se sienten orgullosas de ellos, al igual que se sienten felices por ser como son y tener tantas virtudes. Saben que no son grandes ciudades, que no son cosmopolitas...pero si asequibles a todos. Bolonia te invita a pasearla y a conocer su arquitectura y mientras descubres, continuamente, carteles que anuncian sus festivales de mùsica, de danza, de teatro, su filmoteca de cine... Y ves que no es una ciudad muerta... no quiere ni puede serlo... apuesta por la cultura... ya que sino caerìa en el provincianismo... aunque tambièn hace gala de ser provinciana y no lo esconde, ya que su burguesìa toma las calles y seguramente apuesta por todos estos festivales ya que le gusta ser reconocida dentro de su propio àmbito y serà esta burguesìa provinciana la primera que acudirà a dichas manifestaciones artisticas, ya que le da su poder y su lugar en el juego social, y para eso el teatro, como edificio, es el lugar idonio para representarlo. La burguesia presume en esos lugares, sin importarle lo que ven y a la gente que de verdad le interesa la cultura disfruta de ella. Cultura para el disfrute y cultura para la ostentaciòn y sosten de una clase social.

Bolonia es una ciudad donde vivirìa còmodo, donde puedes desarrollarte humana y personalmente, como lo haces con un amigo que te entiende bien.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Jo niño me das mucha envidia pero bueno se que cuando vengas me lo vas a contar con todo lujo de detalles...se te hecha mucho de menos ,un beso fuerte....

Amador Aranda Gallardo dijo...

Envidia, y de la mala, además. Qué bien trasmites nene las ciudades. Un beso guapo, y vuelve, que se te echa de menos.

Anónimo dijo...

vueeeeeeeeeeeeeerveeeeeeee a caaaaaaasa vuerrrrrrrrrveeee.......vuerve a tu hogarrrrrrrr,

Anónimo dijo...

que bien te sientan esas ciudades, que bien nos haces llegar tus sensaciones pero aún así ansío tus relatos en persona, te beso

Anónimo dijo...

pues yo aqui, esperando a que deje de llover, de dolerme la pierna y cargando fuerzas pa seguir pintando

Anónimo dijo...

¡¡Madre mía, qué manera de describir las ciudades!!, lo leo y parece como si te estuviera viendo por allí con tu iPod viendo y viviendo todas esas maravillas.
Disfruta de tus últimos días allí y nos vemos el viernes...
Un abrazo.

Cosas de San dijo...

No quisiera ahora, con mi comentario, desarmar tu, tan bonito, argumento sobre lo bonito que te resultó Venezia, no, no quisiera; pero podría añadir un par de cosillas...
Venezia, bajo mi punto de vista, sorprende; claro que sorprende, 1ero. porque basicamente no hay coches; y podría terminar ya. Es como si a una bonita ciudad (cualquiera que se te pase por la cabeza) la inundáramos con agua, eso es:bonita y con agua.
Pero lo cierto, déjame decirte, es el sentimiento de melancolía que encierra la ciudad. Sabemos que Venezia está muerta, que tiene los dias contados y eso se percibe en el ambiente. Las casas están que se caen, ya ni se molestan en arreglarlas y eso que hay grandisimas obras arquitectónicas, es como si presenciaras la muerte de algo que antaño fue cuna de grandes artistas y próspera en riquezas.
Estuve allí con 18 años y también me enamoré, como a ti te pasó pero éste verano con la excusa de ir a Florencia (por cierto ahora tengo 32 añazos) propuse la posibilidad de Venezia; volver...lo ansiaba. Volví y lo único que me llevé fue melancolía. Aquella noche de verano sentada en la Gran Piazza de San Marco, con sus caballos bizantinos (copias), su campanille, su gran palazzio Ducal, en fin... todo aquello entremezclado con los miles de turistas (no tantos por la noche), dejándose tomar el pelo en las terracitas sabladoras de la piazza, amenizadas con música de fondo de New York, New York (qué coño pintará New York), todos dando palmas como posesos, dispuestos a gastarse pasta, mientras, bajo sus pies, tras ellos, en el ambiente se muere una gra ciudad... Recogieron las iglesias, los palacios, las casas, todos los objetos de valor se esfumaron, sólo quedan las paredes, los edificos...
Pero bueno, allí sentada sentí melancolía, imaginando como sería la vida antaño. Pero bien, la sola entrada a Venezia no puede dejar impávido a nadie con un minimo de sensibilidad.
Pero voto por Venezia, hay que ir, hay que experimentar que os hace sentir a vosotros. Porque de esos viajes uno se enriquece.
Capicci?
Un saludito a todos desde Catalunya.