jueves, 30 de abril de 2009

FAMILIA TRIFÁSICA

En el tren camino de Madrid, para matar el tiempo, me pongo un capítulo de Brothers and Sisters… Es un capítulo emocionantemente melodramático, como todas las cosas que le ocurren a la familia Walker y por transposición a casi toda familia que se aprecie. En una familia los sentimientos están siempre a flor de piel, un acontecimiento, por pequeño o grande que sea, se vive en profundidad y sirve para que las relaciones vayan creciendo, los amores aumentando y los odios, espero que disminuyendo. Por eso, una familia es un microcosmo dónde todo puede ocurrir. La mayoría de las grandes obras literarias o grandes películas giran entorno a la familia… Todas las sagas son únicas y especiales… Incluso la mía que yo la clasificaría como disfuncional o trifásica… Aunque si me comparo con la de los Walkers o la de los Ewing o la de los Chaning o los Corleone… creo que no tengo nada que envidiarles…Como todos ellos hemos sido una familia unida, con nuestras luces y nuestras sombras… De niños vivimos una infancia feliz, estudiamos en colegios de pago, los que mis padres creían que eran los mejores para nuestra educación y nuestra moral… Cada uno ha tenido su habitación, su cuarto para estudiar… nuestros padres nos repasaban los deberes y nos exigían que aprobáramos todo, más o menos, en Junio…Vacaciones en apartamentos en la costa del sol… Viajes culturales… Catequesis… Ingles como materia extraescolar… “taicundo” cuando se puso de moda… enciclopedias Espasa o Salvat… videos beta… misas los domingos, comunión, confirmación y confesión… suscripción anual a la revista aguiluchos… montañeras de santa maría… jufra e infra… comidas en el Morys, en el Danubio rojo, en el Pinar, en lo de Ignacio y en los cuatro muleros… noches jugando en el paseo… casino primitivo en feria… estudios universitarios a quien quiso… colegios mayores o residencia femenina… piscina en el verano… calefacción en el invierno… No nos ha faltado de nada… pero algo ha fallado o no… No somos normal o sí… Mi familia se caracteriza por ser singular y única, como todas…Nuestra particularidad es que somos los Mozart del sexo (Lo siento Paquito Romero, te hemos arrebatado el título y creo que nos lo merecemos con creces, aunque según dice mi esposa eres todo un profesional)… Creo que vamos a entrar en algún récord, no sé si el Guinness… Mi hermana se quedó embarazada a los 14, su hija a los 18… con lo que es abuela a sus 34 años… y yo tío abuelo a los 38 (La verdad es que la palabra abuelo/a asusta… mi amigo Félix me ha prometido que me va a llevar a la mejor clínica de Botox para que esa palabra la digiera con más facilidad)… Si fuéramos una familia normal y no trifásica, debo reconocer que me encanta, mi hermana estaría siendo madre ahora en lugar de abuela… pero en mi familia, el tema de los embarazos adolescentes es de lo más normal… creo que en la otra vida tuvimos que ser los dirigentes de una clínica abortiva… o fuimos Vera Drake… o de las primeras mujeres que defendieron el derecho a “Nosotras parimos, nosotras decidimos…” Es quedarnos embarazados y nos convertirnos en el grupo místico musical “Trigo Limpio”… Somos completamente amorales y libres… hasta que nos quedamos preñados… practicamos el sexo a tutiplén y cuanto más jóvenes mejor… pero es crecer dentro de nosotros la semillita de la vida… y nos convertimos en los más ultraconservadores del mundo… ¡ya quisieran los antiabortistas yankis…! nosotros hipotecamos nuestra vida por un trozo de carne que crece gracias a nosotros… Y por eso, creo que estamos pagando un karma caro, muy caro, de algo, muy que muy incorrecto, que hicimos en la otra vida… ¡A lo mejor es que fuimos Victoria Vera en Cañas y Barro…! No lo sé… pero como esto siga a así… preveo que mi hermana será bisabuela a los 50, mi madre tatarabuela a los 80 y lo peor de todo es que a mi, me tendrán que ingresar en una clínica de bótox de por vida… ¡Es muy duro pensar que en 16 años podré a ser tío bisabuelo…! La verdad es que yo por mi parte no me puedo quejar… me harto de follar… y no me quedo preñado… es que lo de ser maricón tiene que tener una parte buena…

Este domingo celebramos el bautizo del nuevo y por ahora último retoño… es decir del hijo de mi sobrina de 19, nieto de mi hermana de 34, bisnieto de mi madre de 62 años… Fue un bautizo a toda regla y como manda la tradición católica… su poquito de iglesia… bautizado con agua del Jordan(ni más ni menos)… elegantes trajes… y celebración en el Morys (no podía ser en otro restaurante)… Pero os aseguro que no somos nada conservadores… ni mucho menos… tal vez algún descarriado siga votando a la derecha caduca… pero sólo por nostalgia… pero mi familia… aunque nuestras acciones sean antiabortistas… está comprometida con la evolución… no solo con la evolución de la especie, sino también con la evolución social, humana y familiar y abogamos por un aborto libre y democrático… ¿Qué somos contradictorios? Sí ¿y qué…? Somos reflejo de la sociedad, del lugar y del tiempo que vivimos… y por supuesto que no representamos a nadie, sólo a nosotros mismos…

Pero si algo me llamó la atención en la fiesta del domingo, es nuestra capacidad de adaptación, de olvido… somos capaces de sentarnos gentes muy dispares en una mesa… y celebrar que a pesar del tiempo… de los años, de los amores, de los odios, de las diferencias… todos nos mezclamos, nos contaminamos… Por un lado estaba toda mi familia… por otro lado estaba toda la familia del padre de mi nuevo sobrino… que ya forman parte de nuestro microcosmos y nosotros del suyo… bisabuelas de una parte y bisabuelos de otra que no se habían visto en la vida, que habían recorrido vidas y mundos paralelos se encontraban por primera vez y celebraban que sus genes se habían reunido y habían hecho posible que Fernando existiera. Pero ahí no acababa la cosa… estaba por otro lado la familia del Padre de Andrea… su mujer, Lola, su hija Daniela… y su futura hija… Su hija se llama igual que mi sobrina… la hija de mi hermana Marta y son compañeras de guardería. No se tocan nada pero se entienden de maravilla y se sienten próximas, casi primas sin serlo… Porque sin duda, en un lado está el corazón y en otro la familia… Y mi hermana María, la madre de Andrea, se sentó junto su marido, Pepe, que no es el padre de Andrea y si de Paula mi otra sobrina, que según dicen es la que más se parece a mí, y que fue el padrino de Fernando, el hijo de Andrea… María y Pepe, marido y mujer… se sentaron al lado de José (padre de Andrea) y de su esposa, Lola,… nosotros (mi hermana Marta, su marido Daniel y yo) frente a los hermanos de José y frente a sus sobrinos… y nos dimos cuenta que Andrea nos une, que Fernando nos une… y que la vida nos une… porque la comunicación es uno de los milagros de esta vida… lo que hace que la gente se entienda y se ame… aunque en algunas épocas de nuestras vidas, la distancia haya existido, es bueno sentarse y beber un buen vino o saborear un buen trozo de bacalao estilo Morys y brindar por todo aquello que compartimos… ya que en Fernando se aglutina un poco de cada uno de nosotros… él es gracias a nosotros y nosotros somos mejores personas gracias a él. Gracias, Fernando por existir y por hacernos evolucionar y hacernos absolutamente modernos y trifásicos.


NO DEJÉIS DE VER ESTOS DOS VIDEOS... SON REFLEJO DE UNA ÉPOCA



martes, 21 de abril de 2009

ODIO

Odio no saber sobre que escribir.
Odio no ser capaz de hacer una entrada decente.
Odio la capacidad de Amador, de Carlos Montero, de Justo, de Rosana o Patry para hacer entradas brillantes.
Odio que tenga tiempo para ver tantas series de TV.
Odio no tener nada importante que decir.
Odio no poder provocar.
Odio no haber sido capaz de publicar dos de las últimas entradas que he escrito.
Odio estar autocensurándome.
Odio no tener tiempo para mirar los blogs amigos.
Odio perderlo ligoteando por Internet.
Odio perder el tiempo follando con desconocidos que conozco por Internet.
Odio follar con parejas que se llevan de puta madre.
Odio correrme y que ellos sigan juntos.
Odio tener que dormir solo.
Odio levantarme solo.
Odio ser homosexual.
Odio ser heterosexual.
Odio ser sexual.
Odio el amor.
Odio al activo que luego es pasivo.
Odio el rugido del bear (pagina de contactos por Internet) cuando me llega un mensaje nuevo.
Odio no escuchar el rugido del bear.
Odio que no me conteste los tíos que me quiero follar.
Odio tener que decirle a un tío que no quiero saber nada de él porque no me gusta físicamente.
Odio que me lo digan a mí.
Odio ser tan superficial y vulgar.
Odio a quien lea esto y me critique.
Odio que me lean.
Odio que no me lean.
Odio tener tan olvidado el blog.
Odio que hayan disminuido mis visitas.
Odio no querer ir a Martos.
Odio que mi familia y mis amigos paguen el pato.
Odio no poder estar más tiempo con mis sobrinas y sobrino.
Odio el odio que le tengo a Martos.
Odio que Martos sea tan pueblerino.
Odio a Rouco Varela.
Odio algunas de sus políticas de mierda.
Odio a las que llegan al poder por ser nietas, sobrinas o primas de…
Odio los que pierden su tiempo hablando de mí.
Odio a los que se molestan porque escribo en mi blog lo que me sale de mis huevos.
Odio que alguno de esos tengan cierta responsabilidad en mi autocensura.
Odio este lamento.
Odio haberme enamorado.
Odio haberme tenido que desenamorar.
Odio temer volverme a enamorar.
Odio tener miedo a que me hagan daño.
Odio recordar.
Odio que el disco de love of lesbian me haga recordar.
Odio no ser capaz de reconocer públicamente que el último disco de Loquillo es grandioso.
Odio tener que olvidar.
Odio no ser capaz de hacer ciertas llamadas.
Odio volver a fracasar.
Odio romper mis promesas.
Odio no tener razones para quejarme.
Odio quejarme.
Odio que Martos ya no tenga un grupo de teatro.
Odio que Rosana, Gema, Lola, Ana y tantos otros no puedan utilizar el teatro para hacer teatro.
Odio no haber tenido los huevos suficientes para defender la escuela de teatro y que hubiera seguido sin mí.
Odio a la que se la cargó.
Odio que no hayamos hecho nada.
Odio la inmovilidad.
Odio la incultura de los concejales de cultura.
Odio tener que escribir esto.
Odio tener que desahogarme.
Odio que no se entienda que por eso abrir un blog. ¡PARA DESAHOGARME Y VOMITAR!
Odio esta entrada.
Odio odiar.






miércoles, 8 de abril de 2009

ROCÍO HA SIDO MAMÁ Y ALGUNAS COSAS MÁS

Mi amiga Rocío, me manda un mensaje en mitad de la madrugada. Yo no lo escucho y al despertarme leo: “Desde las once tengo un Miguel, no lo he visto casi. Cesárea y demasiado pequeño, no sabemos que va a pasar, yo no puedo parar de llorar pero quería que lo supieras”. Estoy lejos de ella. Le mando un mensaje y le digo que todo va a salir bien… sé que va a salir bien, no puede ser de otra manera.

Camino por las calles de Sevilla, la mañana es aún algo fría pero el sol promete ir calentando el ambiente… y para mediodía ya iremos todos en mangas de camisa y es probable que vuelva a casa a ponerme mis pantalones cortos.

Love of Lesbian resuenan en mis oídos. Me cruzo con gente montada en bici. Me gustaría ir montado en una de ellas. Love of lesbian sentencian que el fallo mas grave paso por guardar los días más gratos y olvidar los demás.



Sevilla está llena de flash-back y muchos de ellos relacionados con el año 1999, como el título del último disco de los love of lesbian. Anoche cené con Javi, hacía tantos años que no nos sentábamos y cotilleábamos sobre nuestras vidas y las de las personas que nos rodeaban y nos rodean. La conversación, como siempre con él, es fluida, rica y acida… y me dejó con ganas de más.

Hace unos días me volví a reencontrar con Gabi, con ésta en Madrid, una compañera de carrera de principio de los noventa. Hacía más de 16 años que no nos veíamos… me doy cuenta de que mi generación anda algo perdida… aún no ha encontrado su sitio en el mundo… no sabe qué hacer… seguro que son solo algunos… la mayoría han encontrado su trabajo, pagan religiosamente su hipoteca, educan con seguridad a sus hijos, viajan juntos en vacaciones y son moderadamente felices… ¿y que hacemos los que no podemos seguir esa estela…? primero porque algo dentro de nosotros mismos no nos deja… necesitamos cambiar de trabajo constantemente…no sabemos pagar hipotecas… nos tenemos hijos y nos da miedo el compromiso… y de repente una mañana, andando por Sevilla, deseas que una bici se pare y te invite a montarte… te sientes perdido… porque echas de menos casarte con el ciclista que acaba de pasar y que un niño común, entre el ciclista y tú, te despierte en mitad de la noche…y te das cuenta que vives en una continua contradicción… entre lo que quieres o lo que deseas y lo que haces… y vuelvo a pensar en Rocío… y en su Miguel y en las numerosas noches en vela que les queda por pasar, los cines, los viajes, las ferias, las fiestas, las series, las cañas que le quedan por sacrificar por Miguel… y me doy cuenta que soy un egoísta. Me doy miedo. No quiero sacrificio. No quiero compromiso. No quiero hipotecas. No quiero nada que me ate.

Y llamo a mi madre y le digo: Me duele la parte de atrás de la rodilla derecha. Ella me contesta muy segura: eso son las corvas… normal hijo, vas pa los cuarenta… ¿40?

¿Y? Sueño que una antigua pareja y yo nos cruzamos por la calle. Él está mucho más cachas, lleva una camiseta blanca que se le ajusta como nunca se le ajustó cuando iba conmigo y lleva las gafas Prada que le regalé y que no sé si me devolvió. Va con un chico, moniiiiiisimo, los miro, son felices. Él no hace por pararse a saludarme. Yo lo pienso pero no lo hago. Seguimos hacía adelante. Yo vuelvo la mirada hacía atrás. Lo veo juntos y sonrío feliz. Continúo, en mi sueño, caminando por la plaza del Carmen de Madrid, supongo que ellos han doblado la esquina para ir a la Boite.

Sentado en un bar frente el arco de la Macarena, recuerdo otra semana santa, de hace 3 años, donde otro amante, entre polvo y más polvos, me enseñó todas las putas cofradías de Sevilla. Ahora intento no cruzarme con ninguna, las esquivo, las evito… por supuesto no entraré a ver a la Macarena… no me gustan las vírgenes… me parecen peponas… maquilladas, llenas de alhajas… unas barbies con kilos de más…

Entre reuniones y procesiones hablo con Rocío. Está preocupada pero el niño está
bien y ella mejor. Es algo pequeño pero crecerá… y tendrá todo el amor de una mujer maravillosa porque, como le dije el día de su boda, Rocío es espontaneidad, es vida, es alegría, también es lloro, es magia, es una mujer moderna, de hoy en día, es agradecida, es una buena amiga, sabe contarte su vida con todo lujo de detalles, sabe escucharte, sabe mirarte y apoyarte con sus palabras, sabe aconsejarte, sabe escribir mensajes al móvil y enviarlos para que tú lo recibas en el momento justo. Rocío sabe bailar, sabe divertirse y que tú lo hagas con ella. Sabe darte un consejo sabio y sabe estar atenta para que lo pongas en marcha. Rocío sabe estar a tu lado en los malos momentos, sabe abrazarte, como nadie, cuando tu padre se acaba de ir, sabe cuidarte, sabe mimarte… Sabe organizar, sabe preocuparse por las cosas que le afecta: el trabajo, el dinero, la familia… siempre atenta a los demás. Porque ella es así. No sabe vivir si no está volcada en los demás. Por eso es la mejor de las hermanas, es una maravillosa hija y seguro que será una gran madre…